José Jiménez Lozano

El escritor José Jiménez Lozano nació el día 13 de mayo del año 1930 en el municipio de Langa, en la provincia de Ávila.

Durante su infancia vivió en la localidad de Arévalo, también en la provincia de Ávila, y, una vez finalizados sus estudios secundarios, se matriculó en la Universidad de Valladolid, donde se licenció en la carrera de Derecho. Más tarde decidió matricularse en la Universidad de Salamanca, cursando y licenciándose en la de Filosofía y Letras, para trasladarse después a Madrid, donde se matriculó en la Escuela Oficial de Periodismo, cursando también dicha carrera.

En la década de los 80 trasladó su residencia al municipio de Alcazarén, en la provincia de Valladolid, donde aún vive actualmente.

En cuanto a su trayectoria profesional, ejerció el periodismo. En el año 1958 empezó a trabajar como colaborador en el periódico “El Norte de Castilla”, de Valladolid, donde permaneció ya toda la vida hasta el momento de su jubilación. En el año 1962 fue redactor en dicho diario, pasando al cabo de pocos años a sub-director, hasta ser nombrado director en el año 1992.

Compaginó desde el primer momento sus labores periodísticas con sus escritos, y en su bibliografía encontramos obras pertenecientes a todos los géneros literarios.

En el año 1959 publicó el ensayo llamado “Nosotros los judíos”, al que siguieron muchos otros, como “Un cristiano en rebeldía”, “Los cementerios civiles y la heterodoxia española”, “Monasterios de Valladolid”, “Sobre judíos, moriscos y conversos”, “Los ojos del icono” o “Contra el olvido”.

En el año 1971 publica  su primera novela, “Historia de un otoño”, a la cual le siguen, en los dos años sucesivos, “El sambenito” y “La salamandra”. A partir de este momento, el autor ya no dejaría de ir publicando un gran número de novelas, siendo su obra en este género muy prolífica.

Ante la imposibilidad de relacionarlas aquí todas, destacamos, a modo de ejemplo, algunas de ellas como “Estampas y memorias”, “La boda de Ángela”, “Las sandalias de plata”, “Los compañeros”, “Un hombre en la raya”, “Libro de visitantes” o “Agua de noria”.

Es autor asimismo de varios relatos y novelas cortas, como “El santo de mayo”, “El grano de maíz rojo”, “Objetos perdidos”, “Un dedo en los labios”, “El balneario” o “El ajuar de mamá”.

También ha escrito poesía, con obras como “Tantas devastaciones” o “Enorme luna”, así como algunos diarios, como “Los tres cuadernos rojos” o “Segundo abecedario”.

Ha obtenido, a lo largo de su trayectoria profesional, premios tan prestigiosos como el Premio de la Crítica de Narrativa Castellana, el Premio Castilla y León de las Letras, el Premio Nacional de Periodismo Miguel Delibes o incluso, en el año 2002, el Premio Cervantes. Asimismo, fue merecedor de la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes.