Lorenzo de Medici

En su tierra natal, Florencia, se le conocía como Lorenzo di Piero de’ Medici o Lorenzo il Magnifico y efectivamente nació en esa ciudad el 1 de enero de 1449, falleciendo en Careggi el 9 de abril de 1492 con apenas 43 años de edad. Llamado por sus contemporáneos como Lorenzo el Magnífico, fue un poderoso gobernante de facto de la República de Florencia durante el renacimiento italiano, ejerciendo una hábil posición como estadista. 

Siendo Príncipe de Florencia dedicó una parte importante de su vida y de su inmensa fortuna al mecenazgo de las artes, sin abandonar las muchas actividades a través de las cuales ejercía su poderosa influencia, ya que fue un habilidoso diplomático, un brillante banquero, poeta y filósofo que pertenecía a la familia Médici Cagaggiolo o Cafaggiolo y fue el bisabuelo de la legendaria Catalina de Médici.

Su vida y su influencia tuvieron desarrollo en el mayor florecimiento del renacimiento inicial italiano y con su muerte se termina también lo que se conoce como la Edad de Oro de Florencia, así como la inconsistente paz que con su influencia logró mantenerse entre los distintos estados italianos. Los restos de Lorenzo de Médici reposan en la Capilla de los Médici en la Basílica de San Lorenzo en la ciudad de Florencia en donde puede apreciarse las magníficas esculturas que adorna esta capilla de la familia.

Su abuelo Cosimo de Médici y posteriormente su padre, Piero de Médici, “El Gotoso” fueron grandes mecenas de las artes costeando además importantes obras públicas en beneficio de la ciudad y combinaron esta actividad con la administración del importante Banco Médici liderando la república. Lucrezia Tornabuoni, su madre era una poetisa aficionada que mantenía una amistad cercana con otras personalidades destacadas de las letras como lo fueron Luigi Pulci y Angelo Poliziano.

Reconocido como el más inteligente de los cinco hermanos Médici, fue guiado y entrenado por el diplomático Gentile Becchi y además se destacó en múltiples actividades como la cetrería, las justas, la caza y la cría de caballos con los que competía en el palio de Siena, sobre todo con su caballo llamado Morello.

Aun cuando su inicial educación la recibió en Venecia, con tan solo 19 años de edad fue enviado a Milán en representación de su padre, quien lo enviaba en su nombre a numerosas misiones diplomáticas, lo que le permitió establecer muchas relaciones con figuras políticas y religiosas de prestigio como el Papa de turno.

A los 20 años y ante la muerte de su padre, asume la conducción del Estado florentino manteniendo un constante forcejeo con el Reino de Nápoles, pero como tenía un carácter conciliador y diplomático alcanzó la paz con los napolitanos en 1480 después de haberle declarado la guerra a Fernando I de Nápoles.

Por su juventud tuvo que pelear su posición de manera permanente con los otros jefes de las otras familias influyentes de Florencia, por lo que muchos historiadores lo han considerado como un déspota y otros como un defensor del equilibrio en un período especialmente alterado de la historia florentina. Sus altercados con la familia Pazzi lo llevan a sufrir un atentado conocido como la conspiración de los Pazzi que se llevó a cabo frente al Duomo de Florencia un domingo en plena realización de la misa, episodio en el que los Pazzi dan muerte al hermano de Lorenzo, Giuliano.

Mientras el Papa Sixto IV pretendía ampliar con una importante expansión de los Estados Pontificios, Lorenzo se enfrentó oponiéndose a dicha ampliación.

Al contraer matrimonio con una de las mujeres de mayor nobleza,Clarice Orsini, consiguió que su propio hijo siguiera la carrera eclesiástica, llegando a convertirse posteriormente en el para León X.