Costa Gavras

Costa Gavras es un conocido director de cine de origen griego, famoso por haber tocado, desde un aspecto muy oscuro, tramas políticas muy exitosas.

Constantinos Gavras nació el 13 de Febrero de 1933 en la ciudad de Loutra Iraias, localizada en la región de Arcadia en Grecia.

Creció en una villa muy pobre, dentro de una familia humilde pero trabajadora. Al estallar la Segunda Guerra Mundial debieron emigrar a una población aún más pequeña en el peloponesio.

Como su padre había pertenecido a la resistencia griega, prestando sus servicios al ala de izquierda de la EAM, al término de la guerra fue encarcelado, bajo la acusación de comunista. Algunos años más tarde fue liberado con total absolución.

Debido al prontuario de su progenitor, Constantinos no pudo emigrar a los Estados Unidos y tampoco pudo ingresar a la universidad en su país, por lo que decidió marcharse a Francia. Allí, las posibilidades por aquel entonces eran totalmente distintas.

En 1951 ingresó a la escuela de leyes y recibió su título en 1956. Inmediatamente después se enroló en la escuela nacional de cine de Francia, la IDHEC. Al egresar trabajó bajo el mando de algunos de los directores más prolíferos de aquella época.

Su debut dentro de la industria del cine fue recién en 1965 con “Compartiment Tueurs”. A partir de ese momento, muchos de sus filmes fueron subtitulados al inglés, con lo que pudo ganar la suficiente fama como para ingresar en el mundo de Hollywood.

Dentro de su repertorio podemos encontrar la controversial “Z, il est Vivant!” estrenada en 1969. La misma es un thriller donde un investigador privado intenta descubrir la verdad en el asesinato de un importante político de izquierda.

Su primer largometraje para los Estados Unidos fue lanzado en la televisión bajo el nombre de “Eyewitness” (Testigo) y tuvo a Sigourney Weaver como protagonista. En ella también actuaron Morgan Freeman y James Woods.

En 1982, luego de haber lanzado varios éxitos en francés, trabajó por segunda vez con actores de habla inglesa. “Missing” (Desaparecido), trata de la historia real del periodista Charles Horman, quien desapareció poco tiempo después de la revuelta chilena de 1973.

Ese mismo año la película ganó el premio Oscar a la mejor adaptación y también tuvo a Jack Lemmon nominado como Mejor Actor. Durante el régimen del dictador Augusto Pinochet, esta película estuvo totalmente prohibida.

Al año siguiente llevó a la pantalla grande una nueva adaptación, esta vez bajo el título de “Hanna K.”. Una vez más, tocó fuertes temas políticos, concernientes en esta ocasión a Israel y contó con Gabriel Byrne como uno de sus protagonistas.

Ya en 1988 volvió a tener un éxito cinematográfico, al llevar a Tom Berenguer y Debra Winger a protagonizar “Betrayed” (Traicionado). Su alto contenido de violencia racial la hizo flaquear ante la crítica estadounidense, aunque el público la convirtió en un gran suceso.

En la década del ’90, más precisamente en 1995, fue uno de los 41 directores que se unieron para rendir homenaje a los hermanos Lumiére utilizando su cámara original. Entre ellos también se encuentran Spike Lee, David Lynch y Arthur Penn.

Hacia 1997 estrenó “Mad City” (Ciudad Loca) con producción de la Warner Brothers. La misma narra la historia de un guardia de seguridad que es despedido de su empleo en un museo y por consiguiente decide tomar el lugar y a todos sus visitantes como rehenes.

La película fue todo un éxito, puesto que además contó con actores de primera línea como ser John Travolta y Dustin Hoffman. Éste último interpretó el rol del periodista que se encarga de hacer público el escándalo dentro del museo.

Volviendo a sus fuertes raíces activistas, en el 2002 estrenó “Amen.” una coproducción entre Alemania, Rumania y Francia.  La misma analiza fuertemente la unión entre el Vaticano y los Nazis de Alemania y lleva el punto en su título para enfatizar la frase hebrea “que así sea”.