David Cronenberg

Nada remite mas al señor del tiempo, que hablar de Cronenberg, mas específicamente de David P. Cronenberg. Nacido en Canadá una fría madrugada de 1943

Proveniente de una familia judía, con dos padres dedicados mas o menos cercanos al arte (ella pianista, el periodista), tiene de donde sustraer calida información no convencional sobre hecho y valores artísticos de distintas disciplinas.

Unido a Ivan Reitman, David pudo conseguir los subsidios de parte del estado necesarios para poder rodar a comienzos de los 70s sus primeros largometrajes.

El entonces desconocido ahora comenzaba a tomar forma, a la vista de todo el mundo. Lo primero fue Rabid, y se vendió por el mundo.

El estado lo apoyó y pudo rodar dos consecutivas, “Fat company” y “The BRrood”. Las películas del director por lo general suelen ser bastante como Cronoemberg, o sea cuerpos que mutan, mucho escatologismo, pero sin ser de todo bufonescas.

Con Dead Ringers. La película sobre los ginecologos se vuelven jonkis, le valió premios por varios lugares del mundo.

Según Cronemberg, sus películas son posturas enfermizas. Sino, basta con ver películas de el como M. Butterfly o Spider.

El Cronemberg de los 80s 90s es un hitero total, un logro tras otro, marcados a fuego lento. “Dead Ringers”,  “M. Butterfly” y “Crash”, son unas claras muestras de irresponsabilidad y grandeza. Sentados juntos en la misma mesa.

Fue pensado para director de las nuevas guerras de las galaxias, pero en una segunda mirada, George Lucas prefirió enfrentar nuevamente ese desafió solo.
Durante fin de los 90s, aparecieron las películas, “Las Night”  y “Existenz”, para cerrar por el 2000 con “Spider” y 2004, “A hisotory of violence”.