Edward G. Robinson

Edward G. Robinson nació el día 12 de diciembre en Bucarest. A los 10 años se trasladó a Nueva York, junto con su familia. Al cabo de unos años empezó a estudiar en la Academia Americana de Artes Dramáticas, ya que había conseguido una beca para ello.

Comenzó interpretando papeles en representaciones teatrales de Broadway y, aunque participó en un par de películas durante la década de los 20, se dedicó más al teatro. Ello hasta que se le presentó la oportunidad de protagonizar "Hampa dorada”, interpretando a un gángster. Su gran interpretación lo encasillaron en papeles de hombre duro, especialmente en la década de los 30, a lo que ayudaba mucho su aspecto físico.

En la década de los 40, aunque siguió interpretando a gángsters, protagonizó también varios largometrajes que podríamos considerar de drama psicológico, como “La mujer del cuadro”.

Los años 50 fueron malos para el actor. Fue acusado de comunista durante la caza de brujas del senador McCarthy, y tuvo que declarar ante el Comité de Actividades Antiamericanas. Su divorcio de la actriz Gladys Lloyd, con la que se había casado en 1927 le trajo muchos problemas. Y, por si fuera poco, su hijo intentó suicidarse. Aunque todo ello no impidió que durante esta época rodara prestigiosos títulos como “Ensayo dramático” o “Martes negro”.

En los 60 y 70 la aparición del actor en la gran pantalla empezó a ser cada vez menos frecuente, aunque protagonizó aún películas prestigiosas, como por ejemplo “El premio”, junto a Paul Newman,  o “El rey del juego”.

Se puede decir que no paró de trabajar, ya que dos meses antes de su muerte finalizó el rodaje de “Cuando el destino nos alcance”, su última película. Muríó el día 26 de enero de 1973 en Los Ángeles.

A Edward G. Robinson jamás se le nominó para el Óscar, pese a sus geniales interpretaciones. Quizá para rectificar este error, la Academia le concedió una estatuilla como reconocimiento a su carrera, aunque llegó tarde, puesto que se la concedieron dos meses después de su muerte.

Entre las prestigiosas películas que forman su filmografía, podemos destacar “Ciudad sin ley”, “Perdición”, “El extraño”, “El lobo de mar”, “Odio entre hermanos”, “El regreso del gángster”, “Siete hermanos”, “Perversidad”, “Cayo largo”, “Los diez mandamientos”, “El gran combate”, “Millonario de ilusiones”, “El oro de Mackenna”, “Dos semanas en otra ciudad” o “Ni un momento de respiro”, entre muchísimas otras.