Everything But The Girl

Everything But the Girl es una conocida banda de música electrónica de origen británico, famosa por su larga trayectoria y su permanencia casi constante en los charts locales.

Su historia comenzó en 1982 cuando los dos compañeros de universidad Tracey Thorn y Ben Watt vieron un cartel muy gracioso en una tienda de muebles. La tienda en particular ofrecía todo lo necesario para armar un hermoso juego de dormitorio, “Todo, menos la Chica” (Everything But the Girl).

Con este nombre como proyecto decidieron grabar un cover de una canción muy conocida en Inglaterra, “Night and Day” de Cole Porter. El mismo llegó muy alto dentro de los charts independientes.

Como cada uno de los integrantes tenía proyectos paralelos en un principio decidieron no hacer nada realmente serio, pero al ver como su popularidad crecía no pudieron evitar el continuar juntos.

Antes del final de 1983 sacaron como single otro cover, esta vez de The Jam, “English Rose”. El mismo le gustó tanto a su autor original, Paul Weller, que decidió invitarlos a participar con él en una pequeña gira por diversos pubs británicos.

Gracias a todos estos impulsos pudieron alcanzar a grabar su primer álbum, llamado “Eden” donde exploraron los más diversos estilos, desde el bossa nova al Jazz. Su buen recibimiento los puso entre los mejores 40 artistas británicos.

En 1985 salió a la venta su segundo CD, al cual llamaron “Love, Not Money” que sentó las bases de la popularidad para el tercer álbum: “Baby, the Stars Shine Bright” de 1986.

Este último recibió aclamaciones por sus tintes de música clásica y sus  instrumentos de orquesta, pero sin duda alguna, su historia llegó a lo más alto con “Idlewild”. Con esta producción llegaron a estar primeros en los charts por mucho tiempo.

El mercado de Inglaterra ya estaba totalmente conquistado, por lo que solamente restaba llegar a los Estados Unidos. Por lo tanto, en 1990 viajaron a la ciudad de Los Angeles para grabar su disco “The Language of Life”.

Esta vez apostaron totalmente hacia el comercio, acercándose más que nunca al pop que por aquel entonces reinaba en todas las compañías discográficas. Por suerte, esto no hizo que perdieran público, sino que ganaron más y más.

De este modo Everything But the Girl viajó por todo el mundo para grabar su disco en vivo “Worldwide” en 1991. Luego, con el auge de los formatos Unplugged, lanzaron “Acoustic”.

En 1993 una terrible enfermedad afectó a Ben Watt, llevándolo casi hasta el linde de la muerte. Por fortuna pudo recuperarse, pero durante poco más de un año la banda estuvo al borde del colapso.

Finalmente, a mediados de 1994, decidieron regresar al ruedo, pero esta vez con un sonido totalmente renovado, propuesto por Ben durante su recuperación: Everything But the Girl pasó a hacer música electrónica.

Su primer trabajo dentro de éste ámbito se llamó “Amplified” y poco a poco les fue abriendo paso dentro de este nuevo mercado. Por supuesto sus viejos seguidores no los abandonaron en la nueva travesía, sino que supieron adaptarse muy bien.

En 1996 salió a la venta “Walking Wounded” y finalmente entraron por la puerta mayor al mundo del dance y el trance electrónico. A partir de ese momento se sucedieron más y más trabajos entre los cuales “Temperamental” del 2000 y “Adapt or Die” del 2005 son los más brillantes.