Su padre quería que fuera contador, así que, cuando
Giacomo le dijo que quería correr en moto, pidió consejo al abogado de la familia que, malentendiendo entre ciclismo y motociclismo, dio su dictamen conforme, pensando que un poco de deporte seguramente beneficiaría al joven.
Así que, con lo que podría llamarse un golpe de suerte, comenzó la carrera del más grande campeón que el mundo del motociclismo haya conocido. Su leyenda se escribió en números: 15 títulos mundiales (7 en 350 cc y 8 en 500 cc), 122 victorias en Grandes Premios (54 en 350 cc, 68 en 500 cc, además de 37 podios), más de 300 éxitos en total, 18 veces campeón de Italia (2 como junior).
Giacomo Agostini nació 16 de junio 1942 en una clínica de Brescia, el primero de los tres hijos varones de Aurelio y Maria Vittoria, originarios del pequeño pueblo de Lovere, a orillas del lago Iseo, donde el padre era dueño de una turbera que, actualmente es una entre las muchas actividades que son manejados por su famoso hijo.
Desde siempre Giacomo sintió pasión por las motos y, siendo poco más que un niño, comenzó a andar en una moto Aquilotto de Bianchi. Llegados los dieciocho años, por fin consiguió finalmente que su padre le comparara, la que, junto con la Ducati 125, era la moto más adecuada para un principiante: la Morini 175 Settebello, capaz de alcanzar velocidades máximas de unos 160 km/h.
Con esta moto participó, a los 19 años, en su primera carrera, la Trento-Bondone de 1961 en la que quedó en segundo lugar. En principio, fue precisamente este tipo de carreras la especialidad de Agostini, las que alternaba corriendo en circuitos de velocidad, siempre con la misma motocicleta, hasta que, después de haber sido descubierto por la fábrica Morini, consiguió una moto oficial para el circuito de Cesenatico.
En 1963 Agostini concluyó su carrera como piloto de la segunda categoría con la Morini 175 oficial, ganando el campeonato italiano de montaña, con ocho victorias y dos segundos puestos, y el campeonato italiano de velocidad juniors (siempre en la clase 175), ganando todos las carreras del programa. Sin embargo, el año 1963 todavía le depararía mayores satisfacciones.
Sin que absolutamente pudiese imaginarlo, Giacomo Agostini fue convocado por Alfonso Morini para actuar como compañero de Tarquino Provini nada menos que en el Gran Premio de las Naciones en Monza, antepenúltima prueba del campeonato del mundo, en la que la monocilindro Morini 250 pera la favorita para ganarle a la escuadra Honda, dirigido por el rhodesiano Jim Redman.
Sin embargo, la Morini 250 no era competitiva frente a las motos japonesas, en las carreras por el campeonato del mundo. "Ago", como lo habían apodado los fans, dejó la marca de Bolonia para firmar contrato con la MV Augusta. Debutó con la marca japonesa en la primera carrera de la temporada 1964, en la pista en Modena, ganando no sólo esta carrera, sino todas las pruebas de la liga italiana.
Las competencias mundiales, sin embargo, le eran más esquivas y Ago debía contentarse con permanecer en la estela de Mike Hailwod, que, al final de la temporada, pasaría a la marca Honda.
En 1966 Agostini compitió en el Campeonato Mundial contra su ex compañero de equipo: ganó dos carreras del campeonato mundial con la 350 cc. contra seis del campeón inglés que luego obtuvo el título. Posteriormente, al cambiar a la clase 500 cc, ganó su primer título, dando inicio a la leyenda, que luego se extendería también a la clase 350.
Agostini dominó las dos clases mayores hasta 1972, año de la entrada en escena en los mundiales de Jarno Saarinen con la marca Yamaha. Ese año pudo ganar el título de la clase 350 cc, pero desde ese momento le resultó cada vez más difícil ganar. La temporada más problemática fue la de 1973, debido a motos que ya no garantizaban la certeza de la victoria.
El 20 de mayo 1973, perdieron la vida en Monza, Renzo Pasolini y Jarno Saarinen, dejando consternado a todo el mundo del motociclismo. En esa triste situación, Agostini reconquistó el título en la clase 350 cc. Al siguiente pasó a la casa Yamaha, famosa por su motor de dos tiempos y sus mayores logros pudieron verse en la pista americana de Daytona y en la pista de Imola en las 200 millas. Ese mismo año ganó el título mundial de la 350.
En 1975, Giacomo Agostini logró ganar su 15mo y último título mundial a la edad de 33 años.
El 15 veces campeón mundial fue el primer deportista italiano en comercializar su imagen; aprovechando la popularidad obtenida a través de la prensa deportiva y ayudado por su natural fotogenia, se convirtió en un personaje también en campos muy distintos al motociclismo.
Desde finales de los años sesenta fue un protagonista habitual de las páginas del corazón, que gastaron ríos de tinta contando sus romances con actrices, modelos y estrellas del espectáculo. "Ago" fue protagonista de fotonovelas y películas y sirvió como portavoz de las principales compañías, llenando su traje con las etiquetas de patrocinadores y prestando su rostro a numerosas campañas publicitarias.