Heinrich Heine

Con el apoyo financiero de su tío, Heine ingresó en la Universidad de Bonn en 1819, con la intención de estudiar derecho. Aquí AW von Schlegel, profesor de literatura y co-fundador del romanticismo alemán, animó su inclinación literaria. Heine estaba encantado con tanta atención, pero se alejó debido al conservadorismo político de la administración de la universidad y por el antisemitismo que encontraba. En 1820 se trasladó a la Universidad de Göttingen. Las condiciones allí eran incluso menos atractivas; su inevitable oposición a ellos pronto dio lugar a su suspensión, y se trasladó a la Universidad de Berlín. Asistió a las conferencias de Georg Hegel y patrocinadores literarias le ayudaron a publicar Gedichte (Poemas) en 1822. Estos poemas siguieron las convenciones románticas, pero también se caracterizaron por un nuevo uso del lenguaje y de las imágenes. Lyrisches Intermezzo (1823) y el ciclo lírico Heimkehr (1826g) muestran un mejor dominio de la forma lírica y con frecuencia proyectan la simplicidad y la inmediatez de la canción popular y la balada popular. 

Después de un interludio en casa, Heine, ante la insistencia de su tío, regresó a Göttingen. Tras el bautismo cristiano (un paso necesario para los judíos que quisieran ocuparse de los asuntos legales de clientes cristianos), tomó el nombre de Heinrich y recibió su título de abogado en julio de 1825.

Un recorrido a pie por las montañas de Harz y unas vacaciones en la costa del Mar del Norte inspiraron su primer Reisebilder (1826). La libertad de formas, que combina prosa y la poesía y marcada por muchas caprichosas y filosóficas digresiones, resultó agradable al poeta y popular entre el público. Heine produjo otros tres volúmenes, en esta linea, reflejando sus reacciones a posteriores viajes y experiencias en Alemania, Inglaterra (1827), e Italia (1828).

En 1827 reunió sus mejores poemas, publicadas como Buch der Lieder (Libro de los Cantares), una colección que disfrutó de gran popularidad. La calidad cantora de sus versos recurrió a una serie de compositores del siglo 19, incluyendo a Johannes Brahms, Franz Schubert y Robert Schumann.

Entre 1828 y 1831 Heine buscó en vano una posición segura. Su intento de dedicarse al periodismo político en Munich fracasó en pocos meses; tratando de evitar la escritura censurable, sólo consiguió sofocar sus especiales dotes. A partir de entonces las perspectivas de una cátedra universitaria se esfumaron en vista de la oposición e intriga conservadora, y hacia 1831 estuvo encantado de poder emigrar a París, con la esperanza de un ambiente más agradable a raíz de la Revolución de Julio de 1830.

El período "romántico" de Heine prácticamente estaba terminado; el autor decidió dedicar sus energías a las demandas más "realistas" de los tiempos. Su anunciado propósito como autoproclamado embajador cultural alemán, era interpretar el pensamiento alemán a los franceses. Los ensayos de De l'Allemagne (1835) presentan su propio libre análisis de la presente teoría religiosa, filosófica y literaria alemana. 

En estos ensayos Heine defendía una especie de panteísmo influenciado por san-simonismo. La gran variedad de piezas publicadas en varios volúmenes bajo el título Der Salon (1834 y posteriores) llevaron al gran público alemán el pensamiento de Heine, incluyendo sus reacciones a sus experiencias francesas.

Las poesía más tardías de Heine - Zeitgedichte (1832-1844; Poemas de los Tiempos), Romanzen (1839), Romanzero (1851), y de Letzte Gedichte (1853; últimos poemas) -refuerzan el tema de la secularización que sonaba tan fuertemente en sus ensayos. Estos trabajos a menudo reflejan su pesimismo y desilusión al ser testigo de la creciente ola de materialismo del siglo 19. En este período también hay una retirada del paganismo que propugna en su trabajo anterior, inducido en alguna parte por los sufrimientos de sus últimos 8 años, cuando una afección espinal y parálisis progresiva le confinó en su cama. 

Cerca del final, sostenía abierto un párpado con una mano, mientras con la otra escribía hasta que, finalmente, debió dictar su trabajo. En sus últimos tiempos fue atendido por su fiel "Mathilde" (Crescencia Eugenia Mirat), una sencilla joven francesa con quien se casó en 1841.

En este estado físico reducido, Heine reconoció, pero sin rastro de autocompasión, que había llegado a la convicción de la existencia de "una religión para los sanos, y otra completamente distinta para los enfermos" y que ya no se consideraba a sí mismo "el alemán más libre desde Goethe".

Heine murió el 17 de febrero de 1856, y fue enterrado, de acuerdo con sus deseos, en el cementerio de Montmartre en París.