El economista francés
Jean Monnet fue el principal responsable de la de la planificación económica nacional de la posguerra, así como un destacado líder en el movimiento para la unificación de Europa.
Hijo de un importante destilador de aguardiente, Jean Monnet nació Cognac, el 9 de noviembre de 1888. Muy inteligente, ambicioso, y muy bien conectado, recién cumplidos los 20 años, fue nombrado para representar a Francia en la Comisión Marítima Interaliada durante la Primera Guerra Mundial. Participó en las reuniones preliminares para la Conferencia de Versalles y en 1919 fue nombrado secretario general adjunto y asesor financiero de la Sociedad de las Naciones.
A la muerte de su padre en 1923, Monnet renunció a la Sociedad y se hizo cargo del declinante negocio familiar. Después de reorganizar y modernizar la empresa, se convirtió en economista free-lance y asesor financiero para gobiernos extranjeros. Como tal, aconsejó a los chinos la forma de gestionar sus ferrocarriles, a los austriacos cómo reorganizar su sistema bancario, y a un banco de inversión estadounidense cómo colocar su capital en el extranjero. Tras el suicidio del financiero sueco Ivar Kreuger en 1932 supervisó la liquidación de Kreuger and Toll, la gran compañía fiduciaria internacional.
En 1939, con la guerra aproximándose,
Monnet fue llamado de nuevo al servicio del gobierno. Su primera tarea fue la de negociar la compra de aviones de combate a los Estados Unidos. Poco tiempo después se convirtió en presidente del Comité de Coordinación Económica franco-británica en Londres. En junio de 1940 jugó un papel central en el intento fallido de fusionar los imperios británico y francés. Después de la caída de Francia,
Monnet fue acreditado como diplomático por el gobierno de
Winston Churchill. Durante gran parte de la guerra trabajó en Washington, DC, como miembro del Consejo Británico de suministros.
Cuando llegó a Washington, Monnet se alarmó de la falta de preparación de los Estados Unidos para la guerra. Convencido de que Estados Unidos debía finalmente entrar en la guerra contra los alemanes y japoneses, convenció a los funcionarios estadounidenses de calcular que es lo que tendrían que producir para obtener la victoria. Supervisó este proyecto, y cuando los Estados Unidos entraron en guerra, después del ataque japonés a Pearl Harbor en diciembre de 1941, ya tenía disponible un plan para la movilización económico y militar del país, el famoso "Programa de la Victoria". El plan detallaba con precisión los objetivos y las directrices para la producción estadounidense durante los años 1942-1945. Si no hubiera sido por la alarma y el consejo de Monnet, el esfuerzo de guerra estadounidense habría seguido un curso mucho más errático.
En 1943
Monnet fue enviado por el gobierno de Estados Unidos a Algiers con la tarea de organizar una reconciliación entre el general
Charles de Gaulle y el general Henri Giraud. De regreso en Francia en 1944, se convirtió en ministro de Comercio en el gobierno provisional de De Gaulle, que desconfiaba de las tendencias "antinacionales" de
Monnet y sus "eternos esfuerzos por mezclar lo inmezclable". En 1945
Monnet propuso que el gobierno debería adoptar un "plan para la modernización y el equipamiento de la economía francesa". Sus recomendaciones fueron aceptadas, y en enero de 1947 fue nombrado comisario general de planamiento, puesto que ocupó hasta 1955. Debido a la gran influencia y prestigio obtenidos al presidir el "milagro económico" de la Francia de posguerra, los críticos a
Monnet menudo lo retrataron poco halagüeñamente como la eminencia gris de la Cuarta República.
En 1949 Monnet sugirió la fusión de las industrias del carbón y del acero de Alemania y Francia como un medio para prevenir cualquier futura guerra entre estos dos tradicionales rivales. La idea fue aceptada rápidamente por el ministro de Asuntos Exteriores, Robert Schuman, y ratificada al año siguiente por los parlamentos de ambos países. De 1952 a 1955 sirvió como primer presidente de la recién creada Alta Autoridad de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero.
En 1955 fundó el Comité de Acción para los Estados Unidos de Europa, y se convirtió en su presidente en 1956. El Comité fue disuelto en 1975. Monnet fue también una de las fuerzas impulsoras detrás de la organización del Mercado Común Europeo, establecida por el Tratado de Roma en 1958. Por estos y otros servicios a la causa europea, fue galardonado, en 1966 por la Universidad de Bonn, con el primer Premio Robert Schuman.
En sus últimos años Monnet vivió un retiro activo, sin dejar de ser un abierto defensor de mayores esfuerzos hacia la unidad europea. Murió en 1979.