Jesucristo

Jesús de Nazaret nació en Belén, en el año 6 a. C., y fue un reconocido predicador judío, quien fundó la religión cristiana. Es considerado el verdadero hijo de Dios, que vino a la Tierra para redimir a la humanidad del pecado.

El Mesías se crió en el seno de una familia de escasos recursos económicos, hijo de María y, su padre terrenal, José. En ese tiempo, Herodes, rey de Judea, Galilea, Samaria e Idumea, luego de oír varios rumores acerca de que el hijo de Dios había nacido, ordenó matar a todos los recién nacidos que vivan en Belén, por lo que María, José y su pequeño hijo partieron hacia Egipto, lugar en el que permanecieron hasta que murió el Rey.

Varios prodigios fueron protagonistas del nacimiento de Cristo, pues muchos hechos misteriosos habían sucedido en lo que duró el período de concepción, hasta los primeros días de su vida. En primer lugar, el Arcángel Gabriel se le hizo presente a María, quien le aseguró que, a pesar de ser virgen, llevaba en sus entrañas al Hijo de Dios. Este acontecimiento hizo que se atasen varios cabos acerca de la leyenda que existía en ese momento, que redactaba la llegada de un profeta divino descendiente del Rey David. Además, el día de su nacimiento, fue celebrado por los pastores del lugar y por unos astrónomos de Oriente, quienes ofrecieron regalos al salvador.

Los primeros años de su vida, Jesucristo los vivió ayudando a su padre en las tareas de carpintería que ejercía para llevar el pan a su casa.

Hasta los 30 años, existió la llamada "vida privada" del profeta, por lo que muy poco se sabe de él. Una vez cumplido los 30, Jesucristo inició su "vida pública", acompañando a su primo, Juan el Bautista, a llevar la palabra de Dios a través del mundo. Fue en ese momento, cuando Juan bautizó al Mesías en el río Jordán, en donde fue nombrado "La encarnación del Mesías prometido por Dios a Abraham". Un tiempo más tarde, Juan fue detenido y ejecutado por Herodes Antipas, lo que no alejó a Jesús de la predicación.

En sus primeros meses, reclutó a un grupo de fieles adeptos, los llamados "Doce apóstoles", quienes en un principio fueron 13, pero luego de la traición de Judas Tadeo, serían 12, los seguidores de Dios: Pedro, Andrés, Jacob, Juan, Felipe de Betsaida, Bartolomé, Tomás, Mateo, Santiago el de Alfeo, Judas Tadeo, Simón el Cananeo, Judas Iscariote y Matías. Junto a ellos, recorrió Palestina, en donde habló sobre el amor al prójimo, el perdón y la vida eterna.

Su enseñanza se basó principalmente en su sencillez poética, utilizando en gran parte parábolas y metáforas para transmitir su mensaje, en las que anunció la salvación para los humildes, lo que hizo que el pueblo comenzara a adorarlo. Además, algo que acrecentó rotundamente su popularidad, fueron los rumores acerca de los milagros que sus seguidores le atribuían, como: "Las siete curaciones de espíritus inmundos", "La transformación del agua en vino", "Cinco curaciones de paralíticos", "La tempestad calmada", "Caminar sobre el agua", "La multiplicación de los panes y los peces", "Dos curaciones de leprosos", "La moneda en la boca del pez", "Cuatro curaciones de ciegos" y "Cuatro milagros sobre resurrección". Dichos acontecimientos, fueron considerados por sus seguidores como las pruebas de los poderes sobrenaturales con los que el Hijo de Dios contaba.

Debido al crecimiento de Jesús como figura sumamente reconocida en el pueblo, causó que el gobernador romano, Poncio Pilatos, fuera detrás de él, debido a que se había autoproclamado públicamente como el Mesías y rey de los judíos, lo que provocaría un problema político de rebelión en contra de la figura del Político romano. 

Debido a las persecuciones políticas en su contra, Jesús decidió celebrar la que llamaría su última cena, en la que compartió el pan y el vino con sus discípulos, realizando una ceremonia que en la actualidad busca reproducirse en la misa de los católicos. Al otro día, mientras realizaba sus oraciones en agradecimiento en el Monte de los Olivos, fue atrapado por las tropas del Rey. Se cree que Judas Tadeo, uno de los apóstoles del Mesías, negoció la información del paradero de Jesús a cambio de algunas monedas de oro.

Una vez capturado, fue llevado al palacio del sumo sacerdote Caifás, en donde se le preguntó directamente a Jesús si era el Mesías, a lo que él contestó "Ustedes lo han dicho", lo que hizo que el sumo sacerdote rasgue sus vestiduras debido a que consideró que el acusado era un blasfemo. Fue por esta razón, que fue llevado directamente a las manos de Poncio Pilato, quien lo interrogó, y dejó al pueblo que decidiera su suerte, exigiendo que se elija su libertad o la de Barrabás, quien había participado en un motín en el que se había cometido un homicidio. La multitud, pidió que se liberase al bandido.

Fue en ese momento cuando comenzó la Pasión de Cristo, en donde padeció varias torturas y humillaciones públicos que lo llevarían a la muerte, siendo crucificado como solía hacerse con los traidores de la época, luego de cargar su cruz durante el camino del palacio a los montes, de padecer el dolor de una corona de espinas en su cabeza, de ser golpeado por todo el pueblo, de haber sido clavado en sus muñecas y sus pies y, finalmente, penetrado por una lanza que le provocó un paro cardíaco.

Según relatan Los Evangelios, Jesucristo resucitó tres días después de su muerte y ascendió a los cielos, en donde liberó a todos los muertos del pecado y eliminó el pecado original del corazón de todos los creyentes. Judas, luego de presenciar dicho acontecimiento, se suicidó, mientras que el resto de los apóstoles predicaron la nueva religión. Pedro, quedó al frente de la Iglesia por decisión de Jesucristo.

En la actualidad, esta religión es la más practicada del mundo, a pesar de que se dividió en distintas ramas, como la llamada católica romana, la ortodoxa griega y las diversas protestantes.