La vida de
Meyers fue en verdad complicada desde el día en el que llegó al mundo. Al poco tiempo de haber nacido los doctores le diagnosticaron una seria enfermedad cardíaca.
Tanto sus padres como los médicos no esperaban que su vida se extendiera por mucho tiempo, por lo que le practicaron un bautismo prematuro, para que al menos muriera como un buen cristiano.
Luego de tres meses en estado de observación y cuidados intensivos, el bebé
Rhys Meyers logró mejorar su condición y pudo ser dado de alta para marcharse con sus padres a su propio hogar.
Ya en Country Cork y luego de tres años de una convivencia muy traumática, su padre abandonó la familia dejando a su madre sola con sus tres hermanos menores:
Jamie,
Alan y
Paul.
En 1993
Meyers fue expulsado de la escuela secundaria a la que asistía por ser un muchacho problemático. A su vez, se había marchado de su casa para vivir con un amigo mayor que le había brindado cobijo y trabajo en su granja.
Al tener tanto tiempo que gastar en absolutamente nada, se pasaba casi todo el día en los pubs irlandeses jugando al pool y divirtiéndose con sus amigos.
Quiso la suerte que por ese tiempo algunos productores estuvieran de viaje por Irlanda, buscando muchachos jóvenes para actuar en “War of the Buttons”. También la suerte fue la que llevó a estos productores al mismo pub donde él jugaba todas las noches.
En 1994 participó en su primer trabajo en largometrajes, impulsado por los ya mencionados productores para comenzar una carrera actoral. Esta película se llamó “
A Man Without Imprtance” (Un hombre sin importancia).
En ella se narraba la historia de un conductor de autobuses en la ciudad de Dublín de 1960, atormentado por su pasado y su presente homosexual.
Al poco tiempo de haber aparecido en este filme, su cara se hizo reconocida y comenzó a tomar parte en diversos papeles tanto en la televisión inglesa como en su cine.
Ya desde este tiempo adoptó el apellido de soltera de su madre “
Rhys Meyers”, puesto que sentía un profundo desprecio hacia su padre como para darle fama a su nombre.
Sus personajes son de lo más variado, yendo de una estrella de rock glam inspirada en
David Bowie hasta deportistas afamados y de mucha suerte con las mujeres.
“
Volvet Goldmine”, de 1998, fue su inmediato rol protagonista, donde interpretó al músico de rock
Brian Slade quien era investigado por
Arhtur Stuart, interpretado por el galés
Christian Bale.
La historia gira en torno a la loca vida del artista y todas sus excentricidades, que se supone fueron adquiridas de un mentor americano llamado
Curt Wild, una especie de
Kurt Cobain encarnado por
Ewan McGregor.
Luego de este protagónico,
Rhys Meyers tomó lugar en una serie de televisión titulada “
Gormenghast” la cual se mantuvo al aire durante todo el año 2000.
En el año 2002 participó en “
Bend it Like Beckham” (Quiero ser como Beckham) interpretando el papel de un futbolista que entrena a
Keira Knightley.Luego, consiguió formar parte de “
Vanity Fair” (Feria de vanidades) en el 2004 junto a la conocida actriz
Reese Witherspoon.
También en el 2004 apareció junto a
Colin Farrell,
Angelina Jolie y
Val Kilmer en la popular película de carácter épico “
Alexander” (
Alejandro Magno).
Fue por este tiempo que, debido a las constantes preguntas acerca de su sexualidad y su apariencia,
Rhys Meyers se sometió a un pesado entrenamiento físico.
En el pasado, la gran mayoría de sus papeles lo había colocado en personajes flacos, andróginos, con tendencias sexuales dudosas y un aspecto, más que cualquier cosa, excéntrico.
Tratando de sacarse esta popularidad de encima,
Rhys Meyers alcanzó y no ha perdido 15 kilos más de pura musculatura, por lo que en el 2005 fue elegido por
Woody Allen para su película “
Match Point”.
El filme en un principio parece un
shickflick convencional, pero a medida que la trama avanza se vuelve cada vez más enervante y atrapante, haciendo las delicias de todos aquellos que lo hayan visto.
A pesar de los incontables rumores acerca de una relación amorosa con su coprotagonista
Scarlett Johansson,
Rhys Meyers afirma que no ha sucedió nada fuera de lo profesional.
Aún así, se le conocen amoríos con estrellas de sus producciones anteriores como
Toni Collete,
Rachel Leigh Cook y
Estella Warren.
A finales del 2005 fue elegido para encarnar el papel de
Elvis Presley en una miniserie homónima de solo 4 capítulos.
La tira fue tan ampliamente recibida que no solo le mereció el
Golden Globe al
Mejor Actor, sino también una nominación para los
Emmy Awards.
Actualmente, su papel más reciente es el de
Henry VIII en la serie televisada en Inglaterra “
The Tudors” (Los Tudors).
Para el 2007 sus proyectos a estrenarse fueron “
August Rush” y “
The Children of Huang Shi”.