Katharine Meyer Graham nació el 16 de junio de 1917 en la ciudad de Nueva York; hija del banquero Eugene Meyer y la autora Agnes Elizabeth (Ernst),
Katharine fue la cuarta de cinco hijos.
El interés de Katharine por el periodismo nació a una edad temprana. Trabajó en el periódico de la prestigiosa escuela pre-universitaria, Madeira School. A continuación estudió en la Universidad de Chicago y durante los veranos trabajaba en The Washington Post, que era propiedad de su padre desde 1933. Mientras Katharine estaba ausente en la universidad, su padre le enviaba el Post diariamente para mantenerla actualizada de los eventos políticos.
Después de graduarse con una licenciatura en 1938, trabajó como reportera del San Francisco News para luego unirse a la redacción de The Washington Post. Katharine se casó con Philip L. Graham (1915-1963), un graduado de la Escuela de Derecho de Harvard y secretario en la Corte Suprema de Justicia, el 5 de junio de 1940. Cuando Philip sirvió en el ejército durante la Segunda Guerra Mundial, Katherine, madre de cuatro hijos, trasladaba a su familia a las bases militares donde estaba estacionado.
Después de de dejar el ejército, el padre de Katherine convenció a Philip de unirse al Washington Post como editor asociado. En 1948, Eugene Meyer "vendió" la empresa a Philip por sólo un dólar. Philip Graham logró éxitosamente expandir el Post, adquiriendo a sus competidores (The Washington Times Herald en 1954 y la revista Newsweek revista 1961).
La pareja enfrentó tiempos difíciles cuando Katharine descubrió que su esposo estaba teniendo una aventura con una reportera. Philip también debió luchar contra la depresión, entrando y saliendo de instituciones psiquiátricas. En 1963, a la edad de 48 años, se disparó fatalmente con una escopeta de caza. en la granja de la familia.
Tras el suicidio de su esposo,
Katharine Graham tomó el control de la empresa familiar. Incorporó periodistas capacitados para mejorar la calidad del periódico haciendo crecer sustancialmente la reputación de la empresa editora. Bajo su liderazgo, el Post se convirtió en uno de los principales periódicos del país, una fuente confiable para presidentes y líderes de todo el mundo. Ella personalmente supervisó la publicación del Post durante el periodo en que su cobertura del escándalo Watergate llevó a la renuncia del presidente
Richard Nixon.
Como CEO de la Compañía The Washington Post, controló el quinto mayor imperio editorial de la nación, con utilidades crecientes del 20 por ciento al año, desde 1975 hasta 1985. Durante más de dos décadas, Graham construyó un imperio y rápidamente se convirtió en la mujer más poderosa en el mundo editorial. También se convirtió en un modelo a seguir por otras mujeres líderes, en campos dominados por los hombres.
En 1979, Katharine Graham dejó la compañía en manos de su hijo, Donald, pero se mantuvo activa en el negocio editorial y en sus políticas en general. Su casa de Georgetown fue sede de reuniones de jefes de estado, políticos y líderes del periodismo y las artes, a lo largo de las decécadas del '80 y '90. En 1997, recibió la Medalla de la Libertad y publicó su libro de memorias, que le valió un premio Pulitzer en 1998. También fue meritoria del Premio David Rockefeller, la Medalla Presidencial de la Libertad (premio civil más alto de la nación que reconoce un servicio meritorio excepcional), así como un grado honorario de doctor en Leyes de la universidad de Colby. También fue nombrada uno de los 50 Héroes Mundiales de la Libertad de Prensa del Instituto Internacional Prensa.
El 17 de julio de 2001, Katharine Graham murió en Boise, Idaho. Su funeral en la Catedral Nacional fue televisado y fue elogiada por muchas figuras prominentes, incluyendo a la ex primera dama Nancy Reagan y el ex secretario de Estado Henry Kissinger.