Malcom Little o
El-Hajj Malik El-Shabazz, nace en Omaha,
Nebraska el 19 de mayo de 1925. Hijo de un pastor protestante se mudó varias veces de casa con su familia debido a los continuos maltratos que sufrían debido a el color de su piel. Al cabo de un tiempo un grupo radical asesinó a su padre.
Perdido, se dedicó a vivir en la calle convirtiéndose en criminal, traficó con drogas, robó y fue proxeneta hasta que ingresó en la cárcel durante siete años. En la cárcel estudió y se afilió a la
Nación del Islam que, consideraba en la nación blanca una estrecha relación con el diablo. Pasó momentos duros en la cárcel pero sentó cabeza y estudió por correspondencia.
Al cumplir condena y salir a la calle cambió su apellido por una
X, que sustituía al apellido Little. Su negación por tener cualquier relación con la raza blanca, por mínima que fuera, le llevó al extremo de renunciar a su segundo nombre. Enseguida emprendió una labor de propaganda de la
NOI en ciudades como Detroit, Boston o Filadelfia, fundando el periódico Muhammad Speaks. Con el tiempo ganó importancia por sus labores de apoyo al partido y sus compañeros le nombraron responsable en Nueva York.
Fue también responsable de varios templos y los periodistas lo tildaron de portavoz del movimiento NOI. Profirió varios discursos de índole un tanto radical, exalzando a la raza negra como principal estandarte de la humanidad y por tanto, situándola en lo más alto de la orden social. En aquella época conoció e inspiró al boxeador
Muhammad Ali, el cual, se cambió de nombre al ingresar en la orden de Malcolm X. Un tiempo más tarde los dos se pasarían al Islam, renunciando a sus nombres americanos.
Peregrina a
La Meca y siguiendo los cánones tradicionales de la región vistió el ihram, traje tradicional y dio las siete vueltas corriendo a través de las colinas de Al-Safa y Al-Marwah. Este viaje le permitió ver las distintas razas seguidoras del Islam y creyó que dicha religión podría ser la superación de todos los problemas raciales.
El mensaje de Malcom X fue transgiversado por el gobierno quien lo tachaba de violento y de querer eliminar a la raza blanca. Su verdadera filosofía, lo que realmente quería, era terminar con los radicalismos y
poner fin a los brotes racistas que acontecían en distintos lugares del mundo.
Fundó la Organización de la Unidad Afro-Americana ganándose algunos enemigos como
Elijah Muhammad, de quien se dice, fue uno de los que ordenó su muerte. Malcom X sufrió el impacto de más de dieciséis disparos en uno de sus discursos en la ciudad de Manhattan. Los hechos acontecieron el 21 de febrero de 1965.