Escritor y diplomático guatemalteco. Se le otorgó el
Premio Lenin de la Paz (1965) y el
Premio Nobel de Literatura (1967). Tenía una predilección por el
realismo; sin embargo, incursiona en la mitología aborigen, la propia tierra, en el sufrimiento de los campesinos, etc.
Se graduó en Derecho y Notaría en la Universidad de San Carlos (Guatemala), participando en la pugna contra la dictadura del presidente
Manuel Estrada Cabrera, hasta que fue defenestrado de su cargo. Fundando y dirigiendo la Universidad Popular (1923).
Salió a la luz su obra
Leyendas de Guatemala (1930), basándose en
mitos y leyendas. Luego en su novela
El señor Presidente (1946), caracteriza a un dictador de Latinoamérica, a manera de parodia para nombrar con total subjetividad la
opresión que se vivía en su país en aquellos tiempos.Posteriormente se publica su obra
Hombre de maíz (1949) que es catalogada como
su obra cumbre. Clasificada dentro del realismo mágico, en donde se puede percibir la
injuria y la inequidad. Resaltando de forma sobrenatural utilizar el idioma y el ritmo de sus personajes, de sus creencias ficticias, sus maneras y tradiciones.
Otras de sus obras son
Mulata de tal y
Tres de cuatro soles, donde resalta sus conocimientos de
Antropología sobre
mitos mayas, en que se denota un
estilo surrealista, además de las cosmovisiones que distinguen a una Guatemala pre y post colonial.
En dichas novelas,
las deidades mayas son nuevamente ascendidas a sus cargos, como en
Tres de cuatro soles, o son abruptamente
cambiados por nuevos dioses de las diferentes potencias imperiales. Durante esta permutación existen metamorfosis y demás cambios como en
Mulata de tal.
Del mismo modo en sus próximas novelas continúa con la misma tendencia. Destacando lo que llamaron como
La trilogía de la república de la banana, en la que está integrada por
Viento fuerte (1950),
El Papa verde (1954) y
Los ojos de los enterrados (1960).
Entre sus obras de teatro sobresale el inconformismo y la crítica social:
Chantaje y
Dique seco, ambas de 1964.