Miles Dewey Davis III nació el 26 de mayo de 1926 en una zona rural de Illinois. A los dieciocho años se trasladó a Nueva York llevando con él alguna experiencia adquirida en clubes de jazz de San Louis. Aburrido de las lecciones en la prestigiosa Juilliard School of Music, tocaba todas las noches en sesiones improvisadas en locales de Harlem y de la calle 57, junto a
Charlie Parker y
Dizzy Gillespie.
A partir de la experiencia de Be-Bop nació la primera obra fundamental de
Davis, "
Birth of the Cool", grabada entre 1949 y 1950 y publicada como longplay en 1954.
La influencia de estas grabaciones en el mundo del jazz fue enorme, pero el comienzo de los años 50 fueron para Davis (y para muchos de sus colegas), los años oscuros de la heroína. Logró salir del túnel en 1954, y en unos pocos años formó un sexteto legendario, con
John Coltrane y Cannonball Adderley.
Los registros de este período son todos los clásicos: desde la serie de álbumes para Prestige (Walkin ', Cookin', Relaxin', Workin', Steamin) a discos orquestales arreglados por su amigo Gil Evans (Miles Ahead, Porgy and Bess, Sketches of Spain), experimentación con música modal (Milestones), en lo que es considerado por muchos críticos el álbum más bellos en la historia del jazz, el espléndido "Kind of Blue", de 1959.
En los inicios de los años 60 los músicos de free-jazz intentaron socavar la primacía innovadora de
Davis que encontraba ese tipo de música demasiado poco realista y artificial. Respondió en 1964 creando otro grupo formidable, esta vez un cuarteto con Herbie Hancock, Tony Williams, Ron Carter y Wayne Shorter, acercándose poco a poco al rock y a los instrumentos eléctricos (una colaboración con Gil Evans y
Jimi Hendrix que permanecería en la historia, se desvanecó sólo por trágica muerte de Hendrix).
Cada vez más fascinado por el rock psicodélico de la costa oeste, al final de la década, Davis aparecía en los grandes festivales de rock y se ganó a la audiencia de jóvenes blancos "alternativos". Álbumes como "In a Silent Way" y "Bitches Brew" marcaron el nacimiento del jazz rock y abrieron el camino al fenómeno de la fusión.
La personalidad inquieta de Davis, sin embargo, parece llevarlo a la depresión: una recaída en la adicción, enfrentamientos con la policía, un grave accidente de tráfico, problemas de salud de todo tipo y relaciones humanas cada vez más problemáticas.
En 1975 Miles Davis se retiró de la escena y se encerró en su casa, víctima de las drogas y la la depresión. Todos lo daban por acabadoar, pero se equivocaban. Después de seis años comenzó a tocar la trompeta nuevamente, más aguerrido que nunca.
Haciendo caso omiso de los críticos y los puristas del jazz, se lanzó a todo tipo de contaminaciones con los nuevos sonidos: funk, pop, electrónica, la música de
Prince y
Michael Jackson. En su tiempo libre, también se dedicó con éxito a la pintura.
El público no lo abandonó. La última encarnación del gran genio del jazz, fue, sorprendentemente, en una estrella del pop: Davis siguió tocando en los escenarios de todo el mundo, hasta pocos meses antes de su muerte. El 28 de septiembre de 1991, un ataque de neumonía lo derrumbó, a los 65 años, en Santa Mónica (California). Sus restos descansan en el cementerio de Woodlawn, en el barrio del Bronx de Nueva York.