Francesca Mitzi Berger
nació el 4 de septiembre de 1931 en Chicago, Illinois. Sus abuelos pertenecían a la aristocracia húngara y su madre era una conocida bailarina que siempre estuvo pendiente del futuro de su hija.
Siendo muy joven, Mitzi comienza a tomar clases de canto y danza,
debutando en su adolescencia en Los Angeles Civic Light Opera.
Su enorme talento para el mundo del espectáculo al igual que su gran atractivo y porte físico, hicieron que no pase desapercibida en Hollywood y
para 1950 consigue firmar un contrato con la 20th Century fox, permaneciendo en este estudio hasta la mitad de la década.
Con ellos filmó películas como No estamos casados de 1952, apareció en The I don`t care girl, película que dirigió Lloyd Bacon, y de 1954 cabe resaltar Luces de candilejas del gran Walter Lang.
Pero el poco éxito que ganaba Mitzi en este estudio hizo que se decida por abandonarlo en 1954. Poco tiempo después de retirarse de la Fox, la actriz conoce a Jack Bean, un representante de artistas que se encargaría de lanzarla a la fama, y
con quien la joven terminaría casándose.
Con su nuevo apellido, Mitzi Gaynor y su representante y esposo, logran firmar un contrato con la Paramount, donde recién se hace conocida su carrera gracias a logros en varias películas estimables como La máscara del dolor rodada en 1957, Las Girls de George Cukor y Al sur del pacifico de Joshua Logan.
Pero a pesar de ser películas de alta calidad, sus trabajos no fueron perfectos para la taquilla, situación que Mitzi supo sortear apareciendo en los platós con actuaciones en el mundo del cabaret y en la pantalla chica.
En los años sesenta decide retirarse del cine, luego de aparecer en Una rubia para un gángster y Tres herederas de 1963 un film cómico en donde trabajó al lado de
Kirk Douglas y que estuvo bajo la dirección de Michael Gordon.