El actor
Vladimir Kulich nació en Praga, República Checa el
14 de julio de 1956. Su familia mantuvo desde siempre un vínculo con la actuación, ya que uno de sus tíos operaba una compañía de teatro en la ciudad, que le permitió a Vladimir experimentar desde sus primeros años. Con sólo cinco años de edad hacía mandados que casi siempre consistían en comprar jarras de cerveza y algo de comida. Fue en aquella época que un joven Vladimir pensó seriamente en hacer una carrera como actor, al ver lo divertido y relajante que resultaba.
Luego de terminar sus estudios básicos decide seguir cursos de interpretación en su país natal, donde tiempo después de actuar en el teatro de Praga llegó hasta Norteamérica instalándose primero en Canadá donde practicó y se convirtió en jugador de hockey.
Pasó algún tiempo hasta que llega a los Estados Unidos y trabaja en algunas producciones televisivas como
El terremoto de Los Ángeles de 1990, y tiene la oportunidad de participar en algunos episodios de series de televisión como la recordada
MacGyver.Su paso por la pantalla grande llegaría en el año 1009 cuando quedó seleccionado para actuar en la película
Red Scorpion 2.
De ese mismo año es la película
Crackerjack destrucción total, que lo hicieron un actor especialista en títulos de acción y casi siempre como actor secundario.
En 1998 llegó
Tormenta de fuego, y más adelante estuvo en
El Guerrero número 13, un de las producciones más relevantes en donde compartió créditos con
Antonio Banderas, quien tuvo el rol protagónico.
Luego de participar en
Ases Calientes en el 2006 sufrió un accidente al caer de su motocicleta que le causó una fractura de brazo, cinco costillas rotas y varios días de hospitalización, que se complicaron al presentarse una reacción alérgica debido a un medicamento para el dolor.
Este accidente le hizo ver la vida de otra manera y sentirse agradecido por haber sobrevivido.
Su más reciente trabajo fue darle vida a Tiberio en el film
El Templario rodado en el 2011, donde estuvo al lado de
Kate Mara y
James Purefoy.