Drew Barrymore se confiesa anti-botox.

En una reciente entrevista realizada durante la promoción de "Whip it", filme en el que debutó como directora, Drew Barrymore declaró que nunca entrará en un quirófano para hacerse una cirugía estética: "Me da tanta curiosidad saber qué va a pasarme naturalmente que no puedo imaginarme alterando ese proceso", explicó

La actriz, de 35 años, aconsejó a las mujeres que se colocan bótox: "No sabemos cuáles son los efectos a largo plazo, así que paren. Yo prefiero parecer un perro basset hound que hacerle eso a mi cara".

Cabe mencionar que "Whip it" cuenta la historia de una adolescente cuya madre la empuja a participar en concursos de belleza, hecho que la actriz asocia con la relación con su madre: "He intentado crear el tipo de relación que me habría gustado tener con mi madre. En la película, la madre adora los certámenes de belleza y la hija los odia. Entiendo esa dinámica", aseguró, y concluyó: "A mi madre le importaba Hollywood y a mí no. Gran parte de la tensión en la relación materno-filial de la película procede de mis propias experiencias, y hay fragmentos del diálogo extraídos literalmente de conversaciones entre mi madre y yo".