Luego de 11 años de matrimonio y una evidente crisis,
Courtney Cox y
David Arquette decidieron separarse a modo de prueba para aclarar las razones del final de su relación.
Los actores, que pidieron respeto a la prensa y a sus amigos, permanecerán casados mientras intentan poner en claro las razones del final de su relación: "
Seguimos siendo amigos y padres responsables de nuestra hija y todavía nos amamos profundamente", señalaron en un comunicado conjunto publicado el pasado lunes por sus representantes, en el que también indican que el objetivo de esta separación "
es entendernos mejor a nosotros y las cualidades que necesitamos como pareja y para nuestro matrimonio", y donde piden además que "
nuestros amigos, familia, admiradores y los medios nos muestren respeto, dignidad, comprensión y amor en este período".
Cabe recordar que
Cox y
Arquette se casaron en el año 1999 y juntos tienen una hija llamada
Coco Riley Arquette, nacida en el 2004.