Vanessa Paradis admitió que odia que la fama tenga tanto impacto sobre su vida personal, pero reconoció que disfruta los privilegios derivados de la misma.
La actriz, de 38 años, casada con
Johnny Depp (con quien tiene dos hijos
-
Lily-Rose y
Jack-), al parecer disfruta de su fama en momentos como cuando tiene que encontrar una mesa en un restaurante o solicitar un doctor de emergencia; pero de todas formas, lamenta que su fama le afecte a su intimidad: "
A veces me roba mi vida privada y eso me resulta muy duro. Mis hijos no deberían verse afectados por mi popularidad", declaró.
Por otro lado, la cantante francesa agregó que el mejor consejo que obtuvo en su vida es que lo más importante es aprender a esperar, lección que le sirvió tanto a nivel personal como profesional: "
Mi madre me dijo que fuera paciente y que así aprendería a darme cuenta de cuándo las cosas no están yendo de la forma que uno quiere. Si se espera, aunque uno no tenga inspiración, ésta termina por llegar", concluyó.