La falta de espacio en la prisión de California fue una buena noticia para
Lindsay Lohan, quien debía cumplir con su condena de 30 días y salió en libertad el mismo día.
Resulta ser que el pasado domingo por la noche la polémica actriz se presentó para entregarse en el centro de detención de Lynwood, California terminó en libertad durante la madrugada, tras permanecer 4 horas en el lugar, ya que no había lugar para ella.
Lindsay, quien fue sentenciada a ir a prisión luego de que admitiera que había violado los términos de su libertad condicional, reconoció en el juicio que no había podido presentarse al servicio comunitario en un centro de mujeres de Los Ángeles, hecho por el cual la jueza Stephanie Lautner la sentenció a cumplir servicio comunitario en la morgue de Los Ángeles y a asistir a 19 sesiones de psicoterapia antes del 29 de marzo de 2012.
En caso de que la actriz cumpla con las condiciones impuestas, quedará finalmente con sus cuentas saldadas con la ley, pero si no lo hace, deberá pasar el resto de los 270 días de su sentencia en prisión.