Kate Winslet, que siempre se ha destacado por mantener su postura de que la perfección no es estar delgada, ha dado una vez más su apoyo a los talles grandes: "
No tienes que tener una talla S", dijo recientemente, en el marco de la campaña publicitaria que protagonizó para la firma de ropa St. John. "
Esa idea de perfección no existe", aseguró ya, en repetidas ocasiones.
La actriz, consciente de la amenaza que supone para el público la exposición constante a una imagen de mujer extremadamente delgada, luce orgullosamente su curvilínea figura, a pesar de que más de un medio norteamericano la ha criticado duramente por lanzar semejante discurso cuando las imágenes en las que aparece fueron retocadas.
Sin embargo, cabe mencionar que no es la primera vez que la actriz "sufre" las consecuencias de haber sido editada digitamente: en el 2003, la revista GQ retocó su figura al punto que ella misma salió a decir que daban una visión de ella muy alejada de la realidad: "
No sólo retocaron mi imagen, la estrecharon completamente y parecía que medía casi dos metros y que tenía una talla S, cuando actualmente tengo una L", aseguró por entonces.
Y al parecer, tras esta nueva campaña la sombra del Photoshop ha vuelto a opacar su discurso, a pesar de que ella siempre ha luchado por lo contrario mostrarse tal cual es en la realidad.