A poco más de tres meses de haber dado a luz,
Kim Kardashian dejó en evidencia el gran esfuerzo que ha hecho para recuperar su figura ya que a cada evento que viene asistiendo desde su regreso a la vida pública, la madre de North West luce con más curvas.
En su reciente aparición en el programa de
Jay Leno, la prometida de
Kanye West lució un espectacular y revelador vestido blanco de encaje de Dolce & Gabbana, que dejaba ver claramente su sostén y sus hot pants negros. Como era de esperar, lució también su espectacular anillo de 15 kilates, que recibió por parte de su pareja en su pasado cumpleaños.
Durante el programa, la actriz habló de su esfuerzo por perder peso, del que dijo:“
Yo diría que fue el reto más grande de mi vida, gané 23 kilos. Actualmente perdí 23 kilos, eso me puso muy feliz y emocionada”.
Además, respecto a su pequeña hija, confesó: “
Ella es la niña más dulce, nunca llora. Es un angelito perfecto, espero que cuando crezca sea inteligente y testaruda como su padre”.