Si bien es conocida por su extrovertido carácter y por el dominio que ejerce sobre su carrera, parece ser que en el ámbito personal
Lady Gaga no es quien manda; y es que según ella misma confesó, es su novio,
Taylor Kinney el encargado de programar la vida de ambos y quien se encarga de que ella se comporte como toda una mujer… de los años 50´s.
“
Me paso todo el día dando órdenes y diciendo a los demás lo que tienen que hacer. En mi trabajo soy yo quien dirige todo y quien determina el trabajo de cada persona en el equipo, así que lo último que quiero es jugar un papel similar en casa. Entre muros, solo tengo que adaptarme a las necesidades de mi pareja y prepararlo todo para cuando llegue de trabajar. Preparo sus comidas preferidas y lo dejo todo ordenado para que esté cómodo y pueda relajarse. En realidad es él quien lleva las riendas en casa”, reveló la famosa cantante, dejando en evidencia una realidad totalmente opuesta a lo que uno esperaría de ella.
Por su parte, en una entrevista que dio al
Daily Mirror, el actor contó sobre su intimidad con la diva: “
Creo que nuestra relación funciona porque tenemos personalidades contrapuestas. Ella es una persona muy extrovertida, completamente transparente y brutalmente honesta, mientras que yo siempre me he caracterizado por mi timidez. Aunque pueda parecer contradictorio, en el fondo no dejan de ser dos extremos de la misma cuerda que se complementan y están unidos. Por la razón que sea, esto funciona y no podría hacerme más feliz”.
Con ambas versiones, queda en evidencia una vez más la teoría de los opuestos…