En Hollywood, se sabe que los estudios buscan un tipo muy específico de belleza, por lo que estamos acostumbrados a las actrices generalmente altas, de piernas largas, adhiriendo a un estándar de belleza tan definido que realmente terminan pareciéndose mucho entre ellas. El efecto colateral de este tipo hollywoodense es que la gente común a menudo confunde una VIP con otra.
La última víctima de esta confusión fue
Helen Hunt. La actriz hizo una parada en un
Starbucks para comprar una bebida y fue reconocida por la camarera de turno. Más precisamente, cuando le preguntó a la vendedora si quería saber su nombre para escribirlo en el vaso (como es costumbre en la gran cadena internacional de cafeterías), la empleada incluso con un guiño, le dijo que ya lo conocía.
Lástima que al momento de recoger su pedido, Helen Hunt se encontró frente a una bebida para una cierta... Jody! (
Jodie Foster ndr).