George RR Martin pide consejos a Stephen King

Stephen King y George R. R. Martin son sin duda, dos de los autores contemporáneos más populares del mundo.
El primero es el autor de exitosas novelas que han vendido más de 500 millones de copias y de las que surgieron indiscutibles obras maestras en el cine y la televisión (It, La milla verde, La Torre Oscura, La zona muerta, El Resplandor, y muchas más).

Martín, por su parte, es el célebre autor de Canción de Hielo y Fuego, que dio origen a la seguidísima serie de televisión "Game of Thrones".

La extraña pareja estuvo presente en un evento que tuvo lugar en Albuquerque, Nuevo México, durante el cual Martin entrevistó a King. El escritor de "Carrie" estaba en gira presentando "End of Watch", su último libro y el tercer volumen de la trilogía (que comenzó con Mr. Mercedes), protagonizada por el detective Bill Hodge.

Entre las muchas preguntas formuladas por Martin a King durante el evento, llegó también la más de esperada: "¿Cómo haces para escribir tan rápido? Yo suelo emplear seis meses para lograr seis capítulos aceptables, tu en tanto, ya has escrito tres libros!"
La respuesta de King no se hizo esperar: "Hay libros y libros. Escribo 3 o 4 horas todos los días tratando de producir 6 páginas buenas. De esta manera, si el manuscrito es de 360 ​​páginas de largo, son alrededor de dos meses de trabajo..."


Martin continuó: "Y no te sucede tener días cuando te sientas, escribes una frase, y la odias? Entonces controlas los mails y te pregunta si tienes realmente talento o deberías haber sido un plomero? ¿Nunca tienes días así?" Evidentemente, a King no le sucede. Ciertamente, la diferencia en el tiempo de producción entre los dos escritores es bastante clara.

Por el momento, de hecho, todavía no se conoce la fecha de lanzamiento The Winds of Winter (el último y muy esperado libro de la saga Canción de Hielo y Fuego). Martin decidió posponer la publicación del texto, declarándose insatisfecho con la versión final. King, en cambio, como sabemos, sigue produciendo novelas como si fueran pasteles...