Tras diez años de matrimonio con
Hank Baskett,
Kendra Wilkinson anunció el pasado mes de abril que habían decidido separarse. Tras un largo proceso judicial, finalmente en octubre se firmaron los papeles de divorcio, y la ex conejita aseguró por entonces estar orgullosa de si misma por la batalla que dio para salvar su relación antes de decidir terminarla.
Ya separada, Kendra asegura estar enfocada en la crianza de sus dos hijos, Hank, de 9 años, y Alijah, de 4, junto a quienes compartió su primera Navidad separada, y aseguró haber pasado momentos difíciles recordando las pasadas fiestas en familia. Sin embargo, bien conocida por su optimismo, la ex conejita asegura que en los últimos meses ha estado "saliendo consigo misma" y que ha llegado no solo a conocerse sino hasta a enamorarse de su persona: "
El amor y la felicidad son reales sin esperar que alguien o algo lo haga por ti", escribió en las redes.