La soberana más longeva del mundo ha cumplido 93 años y está pensando en cómo barajar las cartas para su abdicación. Como es sabido, el
Príncipe Carlos es el sucesor natural según el protocolo, pero la idea de que
Camilla Parker, aún renunciando al título, en honor a
Lady Di, pueda convertirse en soberana no es algo del agrado de los británicos.
Segundo en rango está el
Príncipe William con su esposa
Kate Middleton, queridos como dignos sustitutos por los súbditos, tanto como para pedirle a la reina que piense bien en lo que hará.
Pero aparte de esto, dentro de la familia real hay un gran alboroto por el cambio y actualización del testamento, que además de derrocar a Camilla, seguramente también causará decepciones a Carlos y al
Príncipe Andrés.
Según la revista Intouch,
Isabel II habría hecho algunos cambios y actualizaciones al testamento en vista de la llegada a la familia de
Meghan Markle y el próximo
Royal Baby, hijo del
Príncipe Harry.
La Reina, una vez más según los rumores, tiene a su disposición activos por un valor de 492 millones de euros que deberán repartirse entre los distintos beneficiarios de la Familia Real. Quienes pagarían las consecuencias de esta actualización, serían ante todo sus hijos Carlos y Andrés que verían sustancialmente reducida su herencia.
Otra decepción es para Camilla Parker, que puede haber sido completamente excluida de la herencia, considerándola así, no integrante de la familia. Contrariamente a la creencia popular, Meghan y Kate con sus hijos serían quienes recibirían una gran suma de dinero y más.
¿Será realmente así? Lo sabremos cuando llegue el momento.