Hace algunas semanas que tuvo lugar la esperada gala anual del Met, en la que
Kim Kardashian lució un ajustadísimo vestido de
Thierry Mugler, con bordados que emulaban ser gotas de agua, y que marcaba excesivamente la delgada cintura de la esposa de
Kanye West.
Y es que lucía tan pero tan delgada su cintura en dicho modelo, que varios de sus seguidores se preguntaron si la diva se había quitado costillas para poder lucir tan pequeña.
Frente a estos comentarios, Kim dejó saber que debajo de ese vestido utilizó una faja que le causó un gran dolor: "
Nunca en mi vida sentí un dolor así" y bromeó con que debería mostrar las fotos de las consecuencias de utilizar dicha preda en su espalda y estómago. Asimismo, la empresaria admitió que no sabía que se podían retirar las costillas para afinarse la cintura.
Por otro lado, su entrenadora Melissa Alcantara, defendió la trabajada silueta de Kim, asegurando que ella trabaja muy duro para sostenerla.
Vale agregar que la modelo aprovechó esta situación para hablar de la línea de fajas reductoras que ha sacado recientemente al mercado, llamada Solutionwear asegurando que "
No son lo mismo que llevar un corsé, sino que por el contrario, se sienten como una segunda piel".