En medio de una larga batalla judicial,
Javier Santos, quien insiste en ser reconocido como hijo legítimo de
Julio Iglesias, habría sido tentado de vender su herencia a pesar de que el juicio por paternidad aún no ha terminado.
Si bien el patrimonio de
Julio Iglesias es difícil de determinar, el cantante de 76 años dejará tras su muerte, además de sus derechos de autor, que se extienden a los herederos por 70 años, propiedades, participaciones en empresas y muchos otros bienes materiales como autos y joyas que el cantante pudiera tener.
Según el abogado de Santos, todo esto, independientemente de si llegaran a ser 80 o 200 millones de euros, puede venderse de antemano por una suma bastante menor, y si bien el comprador corre con el riesgo del tiempo que pudiera tardar cobrar la herencia adicionalmente al hecho de que el juicio aún no ha terminado, es un gran negocio por el cual ya habrían recibido algunas ofertas: "
Recibimos propuestas de Estados Unidos de empresas especializadas y de un inversor particular de Inglaterra" comentó el letrado, quien además asegura que su cliente "
se lo está pensando": "
Por un lado quiere seguir, pero por otro lleva mucho tiempo lidiando con esto". Adicionalmente, existe la posibilidad de que el proceso se tuerza, cosa que el abogado considera improbable, aunque si ese fuera el caso, el dinero recibido por anticipado no se devuelve, pues es un riesgo inherente a este tipo de inversiones.
Finalmente, aunque en caso de vender, Santos recibiría bastante menos dinero que el que podría recibir por su herencia, la suma, que podría rondar los 5 millones de euros, podrá cambiar el futuro de Javier quien más allá de su labor como productor musical, durante los últimos años ha gestionado una tienda de alimentación para deportistas situada cerca de la avenida del Puerto de Valencia, que es propiedad de su antiguo agente musical.