Harry Potter y la Orden del Fénix

Ha sido un largo y solitario verano para Harry Potter (Daniel Radcliffe) a la espera de retornar a Hogwarts, para comenzar el quinto año.
No sólo ha debido soportar a los odiosos Dursley, sino que tampoco ha recibido ninguna carta de sus amigos Ron (Rupert Grint) y Hermione (Emma Watson).
Y como si esto fuera poco, nadie ha mencionado una palabra acerca de su enfrentamiento con Lord Voldemort (Ralph Fiennes).

La única carta que ha recibido, no es ciertamente la que esperaba.
En ella le anuncian su expulsión de Hogwarts por haber usado la magia fuera de la escuela, sin considerar que fue un acto de defensa por la inexplicable agresión de dos Dementores.

Harry deberá defenderse ante a un tribunal ilegal erigido por el Ministro de la Magia, Cornelius Fudge (Robert Hardy), quien tiene sus razones para querer desembarazarse del joven mago.
Sin embargo, Harry es exonerado gracias a la intervención del director de la escuela Albus Dumbledore (Michael Gambon).

Por primera vez en Hogwarts, Harry no se encuentra a gusto, ya que descubre que la gran mayoría de la escuela cree que la historia del su encuentro con el malvado Lord Voldemort es una mentira, poniendo la credibilidad de Harry en duda.

Mientras tanto, en un intento de tener bajo control a Dumbledore y a los estudiantes de Hogwarts, el Ministro de magia ha nombrado profesora de Artes Oscuras a Dolores Umbridge (Imelda Staunton).

Pero este nuevo programa de estudios, aprobado por el ministerio, deja a los jóvenes magos completamente indefensos ante las Fuerzas Oscuras que los amenazan.

Así, por pedido de Ron y Hermione, Harry decide ocuparse del tema, encontrándose con un pequeño grupo de valientes estudiantes que se hacen llamar “el ejército de Dumbldore”, a quienes enseña como defenderse de las Artes Oscuras, preparándolos para la batalla que se avecina.