George y Martha forman un matrimonio que se odian mutuamente. George es un profesor universitario alcoholizado y Martha una mujer que no se siente satisfecha de la vida y que culpa a su marido de todas sus frustraciones. Las peleas entre ellos son constantes, consiguiendo siempre cada uno sacar lo peor del interior del otro.
Una noche, invitan a cenar a un joven profesor recién llegado a la universidad, Nick, junto a su esposa, Monney. El matrimonio no tarda en enzarzarse en una pelea de las habituales en ellos, la cual, sin que les importe ni les frene en absoluto la presencia del joven matrimonio, irá subiendo de tono, intentando cada uno de ellos herir y hacer daño al otro lo más posible.
Esto no va a dejar a sus invitados indiferentes, sino que va a hacer mella en ellos, no tardando en empezar a sacar a relucir el uno trapos sucios del otro, saliendo a la luz verdades que hasta el momento habían permanecido ocultas, por parte de ambas parejas.
Una excelente actuación por parte de los cuatro protagonistas, en una película que hace un retrato descarnado y durísimo de las relaciones de pareja. Un largometraje que no te permitirá quedarte indiferente y que te dejará muy mal sabor de boca.
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